Suzuki presenta la nueva generación del Ignis
Hace ya unos meses, y coincidiendo con una presentación en Madrid, los responsables de Suzuki anunciaron a los medios de comunicación especializados en el motor que el objetivo de la marca japonesa era actualizar por completo su gama, lo cual sin duda lo necesitaba como agua de mayo la red de concesionarios, ya que ésta se había quedado pequeña y anticuada, para lo cual respetarían los nombres de los modelos existentes los cuales poco a poco irían siendo completamente renovados, y hay que reconocer que así está siendo.
Desde el Baleno, hasta el Vitara, pasando por el S-Cross, uno a uno los nuevos modelos han ido siendo presentados, y no solamente han recibido un restilyng, o lavado de cara, como ocurre muchas veces, sino que se presentan como vehículos que, aun conservando el nombre, y en cierto modo el «espíritu» que en su momento tuvieron a la hora de ser comercializados, son completamente nuevos en lo relativo a carrocería, motorizaciones, y, por supuesto, prestaciones.
Este es el caso del Suzuki Ignis, un vehículo que viene a situarse de lleno en el codiciado segmento A, que agrupa a los coches con vocación urbana, fáciles de mantener y de conducir, y en este caso, en el de los crossovers o mini SUV´s, vehículos que además nos permiten realizar salidas al campo, o circular por carreteras con baja adherencia por barro o nieve, y que tanta aceptación tienen actualmente.
El Suzuki Ignis es un viejo conocido, ya que fue comercializado hace años con bastante aceptación, tanto él, como su hermano gemelo, el Subaru Justy, y que estuvo a la venta con motorizaciones gasolina, de 1.3 litros y 1.5 litros, y diésel, de 1.3 litros, ésta última de origen Fiat, y con la posibilidad de montar, en el caso del gasolina, el sistema de tracción 4WD de carácter permanente y que lo convertía en un pequeño todocamino, capaz de circular por cualquier terreno de baja adherencia gracias a su poco peso y aceptable altura al suelo.
Ahora el Suzuki Ignis recupera ese espíritu, conservando los atributos que en su momento le hicieron ser una opción más que interesante para los que buscaban un vehículo pequeño, versátil, de bajo mantenimiento, capaz de desenvolverse en el tráfico urbano gracias a sus recortadas medidas, y de aventurarse, en su versión 4×4, por pistas y carriles.
El frontal rápidamente nos da un aire de familia, y nos recuerda al aspecto del Nuevo Vitara, mientras que en la parte trasera los amplios pasos de ruedas, el paragolpes prominente y el ancho de vías, nos da sensación de aplomo, a pesar de sus reducidas dimensiones. Como novedad, el nuevo Suzuki Ignis incorpora luces de tipo LED.
Lateralmente llama la atención el aspecto elevado de la carrocería, la línea de cintura alta y unas branquias, o marcas en la carrocería, no funcionales, situadas en la parte trasera. En el apartado de colores, el nuevo Ignis está disponible en un total de 14 colores, siendo 9 de ellos monocolor y el resto bitono.
El interior resulta atractivo y diferente, con una pantalla táctil multifunción presidiendo el centro del salpicadero y un «satélite» por debajo donde se encuentran agrupados los mandos del vehículo. El acabado interior es en plástico, llamando la atención los guarnecidos de las puertas, si bien son menos estéticos que los paneles en tela, hay que reconocer que resultan muy prácticos a la hora de limpiarlos, especialmente útil en la versión 4×4 después de haber circulado por zonas de barro y polvo. Estos paneles en plástico permiten una gran personalización interior en lo relativo a combinaciones de colores.
Aunque existen tres acabados, tan sólo dos serán comercializados en España; las versiones GLE y GLX
En lo relativo a motorización nos encontramos con una sola opción, un propulsor de gasolina, que ya conocemos del Nuevo Baleno, de 1.2 litros que rinde 90 CV y se pueda acoplar a un cambio manual de cinco velocidades o AGS automático, de tipo pilotado y también de cinco relaciones.
En el nuevo Suzuki Ignis está disponible la opción de incorporar un sistema híbrido SHVS.
El sistema híbrido SHVS (Smart Hybrid Vehicle by Suzuki) aporta unos 4 CV extra y permite una mayor eficiencia gracias a una batería extra y un dispositivo eléctrico que apoya al motor de gasolina según la demanda en cada momento. La carga de la batería se realiza con la energía que se produce en las retenciones de motor y en las frenadas. Este sistema sólo está disponible en la versión 4×2.
En lo relativo a la opción 4WD, ésta se basa en el sistema ya utilizado en otros modelos de la marca conocido como Allgrip Auto, que es capaz de distribuir automáticamente el par a las ruedas delanteras y traseras cuando detecta alguna pérdida de tracción.
En el apartado de precios encontramos el punto fuerte, ya que con las campañas de lanzamiento podemos disponer de la versión de entrada, el Suzuki Ignis con cambio manual y tracción 4×2 por 11.200 euros, siendo el más alto de gama, el GLX, con tracción a las 4 ruedas, por 14.450 euros, a esto habría que sumarle opcionalmente la pintura metalizada.