Suzuki continúa con su ofensiva en la gama SUV presentando el nuevo S-Cross
Suzuki continúa con su apuesta en el segmento SUV, y tras la presentación del esperado Nuevo Vitara, ahora le toca el turno a la tercera generación del S-Cross, el todocamino de la marca japonesa que fue presentado en el año 2006 como SX4, para posteriormente, concretamente en el año 2013, pasar a denominarse SX4 S-Cross, modelo que ahora recibe una completa remodelación en prácticamente todos los aspectos.
En el interior del nuevo S-Cross mejora tanto la calidad de los materiales como el tacto de los mismos, incorporando un nuevo marco en el panel central, con acabado negro piano, y un nuevo diseño en el panel de relojes.
Exteriormente destaca por un nuevo frontal, mucho más acertado que el anterior, que resultaba demasiado bajo y caído para los gustos europeos, y que ahora se presenta más enérgico y alto, con una parrilla de nueva factura. Se podría decir que, aún manteniendo cierto aire de familia con el modelo anterior, prácticamente todos los elementos de diseño son nuevos: faros delanteros y traseros (que ahora son de LED), paragolpes, capó, etc.
Las llantas también se presentan con nuevo diseño, estando disponibles en 16 y 17 pulgadas, pintadas, y en 17 pulgadas, pulidas, alojando neumáticos más grandes, que pasan a 215/55R17.
La gama de colores pasa de contar de cinco opciones, a nueve, incorporando en la nueva paleta los colores: azul, gris, marrón y rojo.
Con respecto al modelo anterior, el nuevo Suzuki S-Cross crece en altura total del vehículo (+10 mm), en altura libre al suelo (+15 mm), y en ancho (+20 mm), no sufriendo variación en lo relativo al largo, que se mantiene en 4,3 metros.
En lo relativo a propulsores, el gasolina de 1.6 litros y 120 CV del modelo anterior desaparece, siendo sustituido por dos motores turboalimentados de un litro y 111 CV, y 1.4 litros y 140 CV, ambos de la familia Boosterjet, que reducen vibraciones y emisiones, y que pueden ir asociados a cajas de cambio manual de cinco o seis velocidades, o automática, de seis relaciones con cambio en el volante (según motor).
En el apartado diésel está disponible con una sola opción, un propulsor de 1.6 litros y 120 CV, que puede ir acoplado a un cambio manual, de seis velocidades, o automático.
El motor de un litro gasolina sólo puede equipar la tracción delantera, siendo la puerta de acceso a la gama S-Cross, mientras que el gasolina de 1.4 litros, y el diésel, pueden equipar la tracción 2WD, al tren delantero, o 4WD, a las cuatro ruedas.
La tracción 4×4, unida a la mayor altura del vehículo, se traduce en una mayor capacidad del nuevo S-Cross a la hora de circular por pistas y carriles, o carreteras con baja adherencia por nieve o barro, eso sí, sin olvidar que nos encontramos ante un SUV, y no ante un vehículo todoterreno.
En resumidas cuentas el nuevo Suzuki S-Cross viene a completar la gama 4×4 de la marca Suzuki junto al renovado Vitara, presentando notables cambios en prácticamente todos los aspectos, en especial en lo relativo a motorizaciones y aspecto exterior.
Por delante tiene la nada fácil tarea de «plantar cara» a la competencia en un difícil nicho de mercado, que por cierto cada vez tiene más adeptos, y en que se encuentran vehículos como: el Opel Mokka, el Nissan Qashqai, el Seat Ateca, o el Renault Kadjar, por citar algunos.
Para ello el nuevo S-Cross cuenta con una acertada línea (ahora sí), un buen posicionamiento en lo relativo al precio, hay un S-Cross desde 16.935 euros (incluyendo 2.300 euros de descuento de lanzamiento), unos motores modernos y económicos, y el aliciente de cinco años de garantía.
