Los superdeportivos copan la Exposición de Coches y Motos de Ensueño
El Ferrari F40 y el Porsche 959 son dos de las máquinas más deseadas y codiciadas incluso 20 años después de que salieran de la fábrica. La rivalidad entre estos dos superdeportivos es legendaria en el mundo de la automoción y es otro de los pilares de TRAMO.
Tan solo 337 unidades del Porsche 959 se tallaron entre 1986 y 1988 basándose en el vehículo de rallys Grupo B homologado por Porsche. A su espectacular diseño y aerodinámica se le une el clásico motor bóxer 6 cilindros de Porsche que con 2850 cc rendía 450 CV, una verdadera obra de arte con 4 ruedas que hoy se define como uno de los iconos más relevantes del automóvil.
Un año después, en 1987, Ferrari presentó el que para muchos hoy en día sigue siendo el mejor superdeportivo de la historia, el Ferrari F40, una máquina de motor central, tracción trasera, ingeniería de auténtico deportivo de circuito y turboalimentación. Con esta bestia Ferrari consiguió arrebatar el récord de velocidad a Porsche alcanzando los 323 km/h, algo genuino para la época, y con el que la marca del cavallino rampante recuperó el dominio de las competiciones automovilísticas.
